En el mundo del entrenamiento deportivo, la obsesión por cuantificar cada aspecto del rendimiento es palpable. Los entrenadores, en su esfuerzo por optimizar el rendimiento y prevenir el sobreentrenamiento o lesiones, se enfocan meticulosamente en medir la carga externa: kilogramos levantados, metros recorridos, y el número de aceleraciones, entre otros. Estas métricas se han convertido en herramientas estándar en el arsenal del entrenador moderno, utilizadas para diseñar programas de entrenamiento que buscan maximizar la eficacia mientras minimizan los riesgos.
Sin embargo, surge una pregunta crítica en este enfoque cuantitativo:
¿Son realmente fiables estas mediciones externas?
La precisión de estas métricas externas como indicadores del verdadero estrés fisiológico y el riesgo de sobreentrenamiento o lesiones está bajo escrutinio. Aunque intuitivamente tiene sentido medir el esfuerzo y la carga a través de variables externas cuantificables, la correlación directa de estas con los resultados clave de salud y rendimiento del atleta no siempre es clara o lineal. La preocupación radica en si estas mediciones externas reflejan con precisión la carga interna, es decir, la respuesta fisiológica del cuerpo al entrenamiento, que es el verdadero barómetro del estrés, la recuperación y el riesgo de lesiones.
Este interrogante llevó a Rhenagan et al. 2024 a realizar un estudio para evaluar las prácticas actuales y a considerar si nuestra dependencia de las métricas externas es realmente la mejor estrategia para alcanzar los objetivos de entrenamiento y bienestar del atleta.
Un vistazo al estudio
Realizado durante 27 semanas con jugadores de fútbol americano de la División 1 universitaria, esta investigación pionera tuvo como objetivo desglosar las relaciones entre las cargas de entrenamiento internas y externas y los indicadores del SNA. Utilizando tecnologías avanzadas de monitoreo como el Warfighter MonitorTM para la carga interna y Catapult Player Load para la carga externa, el estudio proporcionó una evaluación integral de cómo estas métricas influyen en la recuperación y el rendimiento de los atletas.
Métricas de carga interna vs. externa
Métricas de carga interna: Estimadas a través de la Carga de Ejercicio Cardíaco (ECL), que combina la frecuencia cardíaca de entrenamiento y la duración de la sesión, el estudio encontró que estas métricas son más indicativas de la recuperación y función del SNA. La ECL demostró asociaciones más fuertes con indicadores del SNA, con valores de R² de 0.19 a 0.52 para diferentes medidas y tiempos.
Métricas de carga externa: Medidas mediante acelerometría, las métricas externas mostraron correlaciones más débiles con los indicadores del SNA en comparación con las métricas internas, con valores de R² significativamente más bajos de 0,003 y 0,005, indicando una menor eficacia para predecir la recuperación del SNA.
Hallazgos clave e implicaciones para los atletas
Predictores más fuertes: La ECL fue un predictor más fuerte de la recuperación y función del SNA, destacando su importancia en el diseño de programas de entrenamiento.
Potencial subestimación: La dependencia exclusiva en métricas de carga externa podría llevar a una subestimación de la carga interna, afectando potencialmente las estrategias de recuperación de los atletas.
Monitoreo integral: Los hallazgos abogan por un enfoque holístico del monitoreo de atletas, integrando tanto métricas internas como externas para una evaluación más precisa de la carga de entrenamiento y las necesidades de recuperación.
Recomendaciones prácticas para atletas y entrenadores
Enfoque equilibrado: Los entrenadores y atletas deberían considerar tanto las métricas internas como externas para personalizar de manera efectiva los programas de entrenamiento y recuperación.
Herramientas de monitoreo: Utilizar dispositivos de monitoreo avanzados puede proporcionar información invaluable sobre las respuestas fisiológicas de los atletas al entrenamiento.
Estrategias individualizadas: Los planes de entrenamiento personalizados basados en métricas de carga integrales pueden mejorar el rendimiento al tiempo que minimizan el riesgo de lesiones.
Conclusión
El estudio sobre la relación entre las métricas de carga interna y externa y la recuperación del sistema nervioso autónomo en atletas destaca la importancia de no depender exclusivamente de los datos cuantitativos.
Aunque las métricas internas ofrecen correlaciones más fuertes, las métricas externas presentan conexiones débiles con los indicadores de recuperación del SNA, sugiriendo que su utilidad es limitada en la planificación del entrenamiento.
Esto subraya la importancia crítica de la comunicación entrenador-atleta y la experiencia del entrenador en la interpretación de los datos para ajustar los entrenamientos y optimizar el rendimiento.
En última instancia, la integración de la tecnología y el JUICIO HUMANO proporciona el enfoque más equilibrado y efectivo para el desarrollo y la recuperación de los atletas, enfatizando que la tecnología debe ser una herramienta y no un dictador de estrategias de entrenamiento.
COACH MANU
Comments